Franck Buecher
¿Son compatibles la sabiduría y la extravagancia? Sí: ¡en Domaine Jean-Claude Buecher!
¡Una reunión con Franck es sobre todo un momento poco convencional y una burla! Pero bajo esta apariencia casual se esconde el gran rigor de un enólogo apasionado.
A principios de los años 80, Jean-Claude y Sylviane, los padres de Franck, se especializaron en la producción de Crémant d’Alsace. Se dedican exclusivamente a esta disciplina.
Franck se estableció con ellos en 2005 y gradualmente destiló sus pensamientos sobre las opciones técnicas.
Intransigente, meticuloso, trabajador,.. faltan adjetivos para describir el cuidado con el que Franck busca mejorar. Poco a poco orientó la producción hacia un modelo generalmente reservado para los grandes vinos blancos.
Bajos rendimientos, terruños exigentes, trabajo manual, estas son las opciones que son necesarias.
Franck prefiere parcelas de Grand-Cru, localidades cualitativas y una granja promedio cercana a los 40 hl/ha.
Antes de tener burbujas, el vino espumoso es un vino blanco que debe estar elaborado a partir de uvas lo suficientemente maduras como para contener los elementos minerales que participarán en la complejación de la acidez del vino, la persistencia, la sujeción en boca y por supuesto la conservación. ¡Estamos lejos del vino ácido con burbujas!
La finca se ha convertido en Agricultura Orgánica y luego en Biodinámica y forma parte de una reflexión agroforestal. La vendimia es manual, el prensado lento y progresivo. Los mostos fermentan sin la adición de levadura o azufre. Las granjas se hacen sobre lías y los azúcares restantes ayudan a tomar espuma. La cría en listones es larga, mínimo 24 meses, ¡pero a veces hasta 5 años!
Pero ahora, el Domaine tiene algunas parcelas de variedades de uva no autorizadas para la producción de Crémant d’Alsace, como gewurztraminers que terminaron en el mercado a granel.
Las piruetas comenzaron de esta manera para Franck: una maceración de Gewurztraminer Grand Cru Hengst de una parcela de 70 años. El terroir compuesto por arenisca y la altitud atemperan la exuberancia de la variedad de uva. La maceración aligera la riqueza del gewurz y le da mineralidad y elegancia.